jueves, 29 de diciembre de 2011

El sin reflejo de un vampiro


Muchos me ven, algunos me leen, pocos me conocen…

El año agoniza entre frio, tos y lo que resulta el dolor más doloroso del año. Y ya perdí la cuenta cuantas veces he dicho “esto es lo más doloroso” porque siempre hay algo que lo supere.
Llevo meses intentando, pretendiendo y fingiendo lo que normalmente debería haber sido yo. Pero todo es falso. O la mayoría….
He aquí la verdad de mi vida:
La única verdad, o la más importante es que: no soy feliz. Por alguna razón obtuve lo que soñé durante años. Que fue un trabajo estable. Y más que eso, una plataforma firme que me permitiera hacer lo que en verdad pretendía hacer en esta vida. Pero no soy feliz. Planee, soñé durante años este trabajo, el que desempeño excelentemente bien a diario. Pero, es difícil cuando llegan las 4 de la tarde, y comprendo que no busco dinero, ni fama. Que más bien lo que busco no es ni tantito cfe. O un trabajo…
Y sé que si lees esto, es porque me conoces un poco, y te intriga saber de qué va todo esto. Pero ya sabes la respuesta. Es esa que sigo evadiendo durante meses: No soy feliz porque ella se fue. Sí, mi pareja, la mujer que me hizo ser algo o alguien. La que me enseño a leer y escribir. La que educo mi oído y mi vista. La que modifico mi corazón y mi alma… la mujer con la que me veían por la calle. Creo que esta por demás remarcar que se fue, que nos separamos, que Lluviely no volverá jamás….
Busque un trabajo por ella, por soñar una familia a su lado, por un Hafa Café por viajar, por libros en una biblioteca, por una tarde de verano a su lado. Por ella llegue a este punto.
Paulo cohelo me dijo que si deseas algo con todo tu corazón, el universo conspirara para que lo obtengas, y lo peor que pudo suceder es que fue verdad. Soñé con mi trabajo y lo obtuve, pero jamás imagine que ella partiría de mi mucho antes que cfe me diera las alas que hoy decido arrancarme….
Fue como construir un palacio para una diosa, y cuando lo termine, me di cuenta que esa diosa se aburrió de esperar su altar y fue a buscarse otro donde ser adorada…
Pero no,,, creo que es indescriptible esta sensación que me embarga, de inutilidad, de vacío, de vacuidad. Tengo algo genial, y no lo quiero. Pero no es la eterna inconformidad ni la vana búsqueda del uno mismo. Es solo que construí un universo sin sol. Y ahora muero lentamente de frio, silencio y soledad.
Un año ha transcurrido. Y estoy más muerto que al inicio, aunque la sensación es la misma, esa de sentir que he perdido todo y un poco más. Duele como si ayer fuera el día que a mi boca incendio un fuego, y un sabor amargo como de muerte convido de mi boca a la tuya. Cuantos han dicho “parece que fue ayer” y es verdad. Tu fuego aun quema mis entrañas, pero estoy muriendo ya, calcinado por mis propias decisiones.
Perdí el norte, el este, el oeste y sigo extraviado del sur. Y la cosa va peor. Día a día me siento más miserable, más mundano… inútil. Siempre hablamos de mitades, de equidad entre ella y yo, y no es así. Ella maximizo, exploto mi potencial. Fui la luna y ella el sol y la tierra. Ella me dio luz, vida e importancia. Me dio todo….
Hoy hace mucho frio en esta cueva sucia y húmeda en la que me he refugiado, y el problema aquí no es aceptar que se ha ido y que no volverá… el problema real es que ya probé lo que quiero de una mujer, y será muy difícil hallar algo que me llene tan a la perfección como lo hacia ella…
Me voy solo, en mi caballo de cartón, anhelando que sea primero de enero, y que Silvio traiga a mí la paz que tanto anhelo…
Ya no te espero, Lluviely.
(((Raziel)))

sábado, 17 de diciembre de 2011

Quiero ser aque que no desertó...

Esta noche en que no puedo dormir,
que las canciones me despiertan la piel
en la balsa de náufrago que es mi cama
y que un agujero negro es mi mente desbocada,
me estremezco en las palabras que oigo,
que agazapado en mi grieta me encuentran.
Quisiera huir como a veces huimos
de nosotros mismos hacia otros...

Y quiero ser aquel que aún no desertó,
que aún sigue buscando la luz.
Como todo aquel que vuelve a querer
olvidada toda traición.

Todos amamos tan ciegamente alguna vez
Que intentaríamos besar la boca al diablo,
peinar el viento.
Todos amamos desesperadamente
mientras va cayendo el ángel borrado
de un Edén prefabricado.

Esta noche que no puedo elegir,
Lenguas de fuego lamen mi pedestal
y el volcán rugiente que creía dormido
escupe el desamor creciente;
Indolente desamor donde vivo guarecido.
Y quiero ser aquel que no renunciará
en rueda de sedición.
Como todo aquel que vuelve a querer
y eres poema que se extravió.

Todos amamos tan ciegamente alguna vez
Que moveríamos el mundo con una sola palabra.
Todos amamos desesperadamente
mientras el pájaro metálico escapa
de su jaula de papel.
Todos amamos tan ciegamente alguna vez
cuando amamos desesperadamente.

miércoles, 7 de diciembre de 2011

Mi derecho a hablar!!!


Jamás supe hacerte poesía porque no tuve necesidad de esas palabras que rimen, si al fin y al cabo, rimaban tu nombre y el mío juntos.
Cuantas veces quise llevarte al mar, y que nuestra espuma se mezclara con la del mar, hundirme en la profundidad de ti mientras lo obscuro de un bosque te devora la espalda y a mí la hojarasca con olor a pino, y todo esto junto a un seto de rosas rojas que crece bajo un árbol desde hace ya casi 8 años…
Pero no es tiempo ya para hablar del pasado, ni siquiera es tiempo aun de mencionar algo que hable del futuro; es hoy donde me duele tu ausencia, donde ansío los besos que otro traga y desperdicia como hojas de un libro que no se lee y son sus letras tiradas al aire…
Y sin embargo, si aun sin ser tiempo ya de hablarte te escribo, es porque tengo derecho a hacerlo, porque te amo por sobre todas las cosas.
El frio se estaciona en los huesos y en los grifos del agua, y tus palabras de hielo congelan mi alma aletargando sueños y esperanzas. Agrietando la piel de mi corazón. Haciéndome más pequeño el hueco en el que anido, ese donde me refugio cuando el mundo entero se me cae en los hombros y solo busco tus ojos como faros, vana tarea, ardua necedad del ser que suele amarte….
Cuantas palabras faltaron entre los dos. Cuantos besos se oxidaron en el hierro de este amor, cuantos cajones me hicieron falta para atesorar cada cosa que tus dedos tocaron, esos dedos afilados tan delgados, los únicos que supieron acariciarme el alma.
Y sigo hablando del frio, y te hablo del derecho que tengo a hablarte, porque en mis manos fundiste las tuyas, y forjaste con ese calor el futuro, sueños compartidos. Amor de dos en un solo cuerpo, eterno Louie. Amor de uno en dos cuerpos, la dualidad perfecta que nos sabe complementar sin forzar nada, porque te conozco como tú me conoces, y sabes que este derecho a hablar es tu derecho a callar.
Porque sabes que mis letras jamás han hecho tanto eco como lo hicieron los besos que entre los dos nos dimos. Porque sabes que un abrazo de alas derrite más si ambos las tienen. Te hablo del derecho que tienen Leah, Leizar y Caín de nacer…
Mientras seguirás picando piedra, yo seguiré comiéndome las agujas de los relojes que día a día alimentan mi anhelo de verte volver. Maldita y magnifica tortura de desearte a cada segundo. Cada vez que me viste el alma o yo te la vi, es de lo que aquí te hablo. Del derecho que, cada vez que explotamos al unisón, hicimos posible. De esa unión de sangre enterrada a los pies de un árbol que dio paso a un seto de flores moradas, como las que tu amiga de la infancia te llevaba cada cumpleaños...
Te hablo de las cosas que jamás olvido, ni olvidas tú, esas que llegan atropelladamente a tu mente cada vez que el, o alguien hace algo que yo hice. Una caricia, un beso, una sugerencia, una broma, una mirada lastimera… algo, siempre hay algo que me lleve a ti, lo sé por derecho, porque así cada día, los duendes del recuerdo te traen hasta mi con el más sutil de tus detalles. Como hallar un cabello largo entre mis sabanas, y atesorarlo como atesore cada uno que tu cabeza desprendió en nuestro pequeño nudo indeshacible. Incluyendo el primer hilo de plata que de ti nació. Y no hablemos de las cosas que entre los dos sucedieron por primera vez, porque por mucho derecho que tenga a hablar, mi alma acallara a mis dedos con el celo del amante que no quiere soltarte y te susurra al oído: “solo 5 minutos más amor, y nos levantamos”
Soy pobre de rimas y conjugaciones, porque el amor que te tengo no es fijo ni en línea recta, es como la raíz de un árbol milenario, crecido al centro de un bosque de chapulines. Soy escaso de métrica y ritmo, porque esa parte que el corazón ocupa para declamar también la ocupas tú. Hoy todo eres tú. Y este es mi derecho de elegir a quien llevar en mi corazón eternamente. Y te llevo sin peso ni culpa, te llevo como aquel que fue a la luna y por ser un explorador llevaba consigo una bandera de su nación. Sin ser obligación sino más bien un derecho de expresión, de decir: este soy yo, y este es mi corazón que tanto te ama.
Este es mi derecho a hablar, y poder decirte: te sigo amando….

“Te doy una canción y hago un discurso sobre mi derecho a hablar. Te doy una canción, con mis dos manos, con las mismas de matar. Te doy una canción, se abre una puerta, y de la sombra sales tu. Te doy una canción, de madrugada, cuando más quiero tu luz. Te doy una canción y digo patria, y sigo hablando para ti. Te doy una canción cuando apareces el misterio del amor…
y si no lo apareces no me importa, yo te doy una canción.

(Creen que lo digo todo, que me juego la vida, porque no te conocen, ni te sienten…)
Te doy una canción como un disparo, como un libro, una palabra, una guerrilla, como doy el amor…”

viernes, 2 de diciembre de 2011

Las cosas van mal (tu quemas mi cabeza)

Ohh, todavía ansío
tenerte a mi lado
se que nuestro amor se desvanece
pero pronto brillará

Y no puedo ver hoy
Y no puedo ver mañana
tu quemas mi cabeza
y en mi cerebro eso va mal

si, Sigo buscando
por siempre en tus ojos
Seré cuidadoso
pero pronto brillaremos

y voy a vivir hoy
Y voy a vivir mañana
no importa lo que se dice o se hace
Incluso si va mal
Incluso si va mal
Incluso si va mal
tu quemas mi cabeza

lunes, 14 de noviembre de 2011

"Un Pendejo Vestido De Civil"



No soy actor porque no tengo otra cara que poner. No sé qué otra vestir. Y no creo que haya alguna materia que me enseñe a desprenderme de mi propio papel.
No se mentir un beso o una sonrisa.
Ni mi cara ni mi cuerpo obedece un papel escrito, solo sabe oír lo que mi alma le dicta que quiere vivir.
No fui actor porque no se ser otro que no sea yo. Ni sé como pretender tener otra vida que no sea esta que ahora vivo, y que es la que más me seduce.
No soy actor porque no conozco escenario más intenso que no sea el que mi mente esconde tras un telón que se abre cada  noche.
Las únicas actuaciones que me permito vivir a través de otros son aquellas que son cantadas y que suelen hablar de la infidelidad, pues es el único papel que no vale la pena actuar personalmente.
La actuación existe en la mente del astuto que ve, pero no pretende vivir. Porque el que pretende vivir lo que no es, es como querer hacer de una mentira una verdad con el simple hecho de interpretar.
Vestir una máscara tras otra borra todo rastro de originalidad, porque recuerda que dos males no hacen un bien en ningún sentido.
Una actor subsiste bajo tantas mascaras, de ahí su falsa pasión por el escenario, que no es más que la desesperación de querer ser alguien, cuando hartos de ser todos, no son ni uno, no son más que sombras de lo que un día soñaron ser.
Un actor es una sombra que cualquiera posee de frente al sol, imita al ser, pero no tiene dimensión ni profundidad, solo es apenas la silueta de alguien que en verdad es alguien.
Un actor es como un lienzo reciclable que ni el blanco es su color, solo existe cuando ha recibido un color ajeno.
Y aunque digas que es interesante meterte en los zapatos de otro, yo no conozco vida más intrigante e interesante que la mía.
No conozco mascara más sincera que esta de nariz lisa, de pupila insomne, de boca necia y labios afilados que saben cortar cuando es preciso.
No hay libreto más atrayente que ser el protagonista de la vida mía, la propia que me permite ser tan libre como para escribir esto.

Su lema es “imito luego existo”

Impostores, falsos, ladrones. Sé que no todos son iguales, pero todos los actores nacen con la profesión por dentro. Es decir, nacen huecos y solo anhelan ser como alguien más que si ha tenido una vida propia sin importar si ha sido blanca negra o de color marrón. Es propia y no un panfleto para aprenderse.
Digo lo que veo, y escribo crudo porque así me enseñaron a ver, sin filtros ni cristales opacos.
Sigo siendo el mirón solitario que se pierde en las estrellas que otros pusieron nombre, pero yo cambie las mías por no ser de nada, ni nadie.
Soy mil cosas pero yo soy yo mismo. Aprendo de todos sin querer imitar ni igualar. Se escuchar sin copiar, se leer sin ansiar escribir. Porque yo sé definir entre vivir el sueño lucido, y despertar para vivir la realidad, por muy cruda que sea.
Y aunque hoy naufrago a la deriva en esta intemperie, prefiero el dolor de tu ausencia que es la realidad a soñar con ser otro que no soy.
Prefiero ser yo antes que un actor y ladrón.

Me publico completo, de detesto probable. Si uno no se desnuda se trasfigura en reto todo lo desnudable…
Quizás sea inoportuno o acaso delirante. Soy de tantas maneras como gente prefiera nomas calificarme.
No tocar duro nuestras verdades, levanta muros, pudre capitales.
TOCANDO FONDO NACI UN BUEN DIA, TOCANDO FONDO, ANDO TODAVIA…

Muy, pero muy atentamente: Raziel el natural. El real.

martes, 8 de noviembre de 2011

....Alguien


Quiero alguien para compartit, compartir el resto de mi vida, compartir mis pensamientos mas internos, conocer mis detalles intimos.
Alguien que este a mi lado, y me dé apoyo, y a cambio ella recibira mi apoyo.
Ella me escuchará cuando yo quiera hablar acerca del mundo en el que vivimos, y sobre la vida en general. Aunque mis opiniones puedan estar equivocadas, e incluso, puedan ser perversas ella me escuchara.
Y no será facil de transformarla a mi manera de pensar. De hecho, estar siempre en desacuerdo, pero al final de todo, ella me comprenderá....



Quiero alguien que se ocupe de mi apasionadamente, con cada pensamiento, y con cada respiro.
Alguien que me ayude a ver las cosas de una manera direrente. Y todas las cosas que detesto casi lleguarán a gustarme.
No quiero estar atado a los hilos de nadie, cuidadosamente trato de apartarme de estas cosas, pero cuando duermo, quiero a alguien que me abrace, y me bese tiernamente.
Y aunque cosas como estas me ponen enfermo, en un caso como este, lo hare...


(Raziel>> )



jueves, 27 de octubre de 2011

Mi anuncio publicado en el periodico local:



Caballero en edad de merecer, con un pelo de tonto, cuatro canas, el pasado no resuelto y muchas ganas ya sabe usted de qué.
Informal, ilustrado, manejable más amigo de gatas que de perros.  Con dos ulceras y una inexplicable mala salud de hierro.


Solicita con fines poco serios
señora aficionada al adulterio
o señorita de entre quince y cuarenta
(si no los aparenta).


Las cartas a: Calle melancolía, hoy Avenida Negrete s/n. Con foto que prefiero de cuerpo entero y sola, a vuelta de correo irá la mía con traje gris y más chulo que un gánster porque la tengo, como le diría: más larga que Pinocho…

Se aceptan:
 feministas sin pancarta, cursis enamoradas del amor o pesimistas hartas de estar hartas de decirme que no.
(Igual me da mujer de mala nota, especialistas en Borges o el Marqués, si no vienen tocándome con Cuauhtémoc Sánchez las pelotas.)

Dispuesto a todo incluso a defraudarle, alérgico a la infidelidad y al reloj con un precoz talento para el arte de la enamoración.

Las cartas: a paraíso fugaz, hoy travesía de mi alma por el desierto, con dos fotografías del último verano,  a vuelta de correo irá la mía,  donde aunque no tan flaco y pálido destaco por tenerla más corta todavía que un lunes sin tabaco.

>>Anímense: monjitas de clausura
>>Absténganse: fanáticas y abstemias
(la pasión con controles de alcoholemia no me la pone dura.)

Podrán buscarse amantes de ocasión cuando la decadencia lo aconseje que traigan referencias y se dejen ganar al ajedrez.

A las interesadas aseguro: máxima indiscreción, ninguna prisa, buena conversación, besos con risas y noches sin futuro.

Cartas: al bulevar del mal vivir, también llamado de los sueños rotos,
adjunte un par de fotos de frente y de perfil, a vuelta de correo irá la mía con pose de poeta parnasiano ufano de tenerla todavía más dura que Don quijotito (el de la mancha)…

jueves, 20 de octubre de 2011

Hablandote de mi, sin decir nada.


Hoy en día, caer dormido es casi como hacer magia o alquimia.
Ando sin hacer camino ni historia, ando sin tiempo y perdido en el espacio en que no estás.
Y esta pausa en mi vida cura mis heridas, y el asma, pero no la disnea que me despierta en algunas madrugadas acompañada de ese sudor frio que hiere.
Los días se fugan antes que el sol me caliente un poco el alma, y demasiado lento para evitar que requeme mi rostro, ese que cada vez reconozco menos tras los espejos, pues en más de una ocasión he hallado una risa dibujada en el…
Escondo mis ojos y oculto mis manos para todos, menos para ti. Como poco y ando deprisa. Solo bebo agua sin café. Desayuno prisa y aire frio. Ceno humo sin leche.
El año agoniza rápido, en el aire huele ya a incienso y a ofrendas, a copal y flores anaranjadas. Cada vez se queda más horas ese frio y las ansias de verte volver con alas de hielo aumentan sin ver pronta solución.
Escribo poco y con pausas prolongadas. Escribo con lápices cortos. Cierro los ojos y miro mas buscando el alma. He perdido la cuenta de cuantas veces he volteado al lado de tu cama buscándole cabellos a mi almohada. Inventarte cada noche no será una buena suma a la larga.
Todo te recuerda, y las sonrisas azules de los ángeles solo consiguen cegar mi ya herida fe.
Solo me alivia perderme por ahí, hasta que el reloj me encuentra tirado en alguna esquina o bajo de algún árbol seco. La lluvia aun cae a pesar del calendario y no entiendo los susurros que me llaman desde la obscuridad.
Intento decirte todo con una canción y sin embargo solo busco callar para no alejarte más.
Pero, no porque calle significa que no te extrañe, ni porque desaparezca de tu vida significa que tú no sigas siendo siempre mi propósito.
Si me hago humo para ti es porque quiero verte volver, porque quiero darte el espacio y la libertad que necesitas para volver a verme como lo que soy: el Raziel que jamás te abandonará…
Recibe este beso mudo, y este abrazo silencioso en señal de mi eterna fidelidad.
Las ansias de tus besos seguirán siendo el combustible del artefacto este que llevo ajado al pecho por dentro, ese relojito que aun hace “tic tac” (por llamarle así al ruido de sístoles y diástoles, pero tu bien sabes que dice ese rumor metonímico.) y que me mantiene vivo aun sin ti.
Son meses, días y días en los que no te tengo de ninguna manera real, que no sea una invención de mi fantástica creatividad mental. Y así se me va un día mas, en el que intento contarte todo, pero no digo nada, porque tú sabes cómo son mis días. Lo sabes porque sé que compartes este hueco en el pecho, esta presión en el corazón y esta nube negra que nubla la mente.
Seguiré buscando un poco más, intentando hallarte volviendo por el horizonte, entre el alba y el ocaso, un buen día de frio…

lunes, 10 de octubre de 2011

Estoy en ti

Hay un amor veloz
rápidamente descendiendo
por mis brazos, por mi piel
hasta mi corazón,
para quedarse en él.

Me hace pensar así
en mi costumbre de arrojarme
por tus ojos hasta ti,
mientras tú crees verme
viéndote reír.

Es un amor real,
con todos tus detalles,
que son de ti.
Y ya es muy tarde ya,
para que no haga daño
dentro de mí.
Pues siempre estoy, en ti.

Y aunque parezca extraño y pronto, en ti;
aunque parezca a veces tonto, en ti.
Y casi ayer te conocí. En ti.
Pese a la noche y pese al día, en ti;
pese a mi indiferencia fría en ti.
Y casi ayer te conocí. En ti.

(Silvio Rodriguez)

Una amada cancion que hoy cobra vida en mis entrañas. pero, no es para quien la provoca. si tan solo supiera descifrarles esta cancion para que comrpendieran como la siento. Ojala tu, Azriely, la comprendas.

jueves, 6 de octubre de 2011

Polvo antiquisimo...


Hoy me encontré a un vagabundo en la estación de un ferrocarril que ya no existe, y por poco parecía uno más de los desdichados que tienen por cobija las estrellas, pero este no mendingaba por una moneda. Parece irónico, pero no. Este vagabundo tenia comida agua y lo que parecía un cigarro a la mitad de fumado. Incluso tenía bastantes cobijas que si bien estaban sucias no se notaban raídas o rasgadas. Su mirada era vaga, perdida, como quien ve algo más allá de este plano.
Atravesándome con su un par de ojos color verde oceánico, soltó una risa poco nerviosa y si muy sincera. No le di importancia, yo seguí en mi labor que a esa hora era casi corriendo. Después de desayunar miles de números y letras lo único que buscaba era terminar para poder comer algo no tan etéreo. Pero a dos pasos de él, detrás escuche su voz, limpia, sin enfermedad ni arrugas. Era una voz joven, fuerte, incluso retadora...
Las palabras que me soltó no puedo recordarlas, pero si se lo que sentí, y lo que en mi mente se dibujo de humo multicolor. Cuando el hombre sucio hablo mi mente trabajo más rápido, entonces la vi a ella, a mi amada que me abandono, pero la vi como hace años, es decir cerca de mí, con ojos sinceros que nada ocultan ni temen. Sin lágrimas ni excusas. Recordé por un instante el momento en que de tus palabras salió la frase: “siempre estaremos juntos”
Un rayo de luz de sol que me dio directo a los ojos me devolvió a este plano. Cuando la imagen en mi mente se esfumo, y la voz de ella aun haciendo eco en mi recuerdo, voltee a ver al monstro que había sido capaz de saber algo tan íntimo de mí. Pero aquel despreciable ser sonreía debajo de la mugre que adornaba sus mejillas que adivine rosadas como la piel de bebe.
No se qué paso, no sé cuánto tiempo mi verde opaco se clavo en el suyo de perla marina, solo sé que hubo algo que me detuvo, que me afianzo al piso de madera vieja que mis botas de trabajo pisaban, se que algo me unió a ese ser, como si algo de mi estuviera impregnado en el, o viceversa.
Entonces el hijo del polvo volvió a hablar, su voz era ruda, rígida, pero no era agresiva sino de un mismo nivel de tono cada palabra que soltó
-no dejas de pensar en ella verdad?
No supe que responder. Podría haber dicho sí, pero el sabia la respuesta afirmativa, él sabía lo que dentro me pesaba la mente.
Tome asiento al lado de él. El miedo me poseía pero una voluntad aun más fuerte me hizo sentarme ahí, a su lado. Entonces él me acerco el resto del cigarro, lo encendí y espere. El silencio soplaba el polvo y aun riendo, el extraño comprendió mi confusión, así que comenzó a hablar así:
-No te asustes, no te conozco, no se tu nombre. Poco importa realmente. Lo que importa es, que no la sueltes desde dentro. Eso mantendrá tu cordura si aun la tienes, eso te rescatara siempre. No te conozco y sin embargo se lo que eres. Lo sé porque te veo, y me veo cuando yo encontré a mí… a ella.
Noté como su voz se quebró, como esa firmeza en su voz dio una nota baja cuando de su boca saldría la palabra que él sabe que solo pertenece a su amor real. El siguió hablándome.
-Perdóname, no estoy acostumbrado a hablar con alguien. Hace tanto tiempo que no salen de mi boca más de una o dos palabras. Mi nombre ya lo conoces, lo has oído mucho, pero no viene aquí a discusión. Solo quiero decirte que no estás solo, que el camino que has recorrido lo han emprendido también muchos otros, incluso antes que tuvieras conciencia. Más de uno hemos decidido cortarnos las alas, por así decirlo. Muchos hemos hallado simplemente lo que era nuestro y nos fue arrebatado. Y casi todos hemos hecho la elección consientes de esto, de que no hay vuelta atrás.
-Pero que elecci…
-Shhhhh, se que tienes dudas –me respondió- pero no debes presionarte de más. Te lo digo por experiencia. Todo sucederá como debe ser. Si ella volverá lo hará en su tiempo y forma. Y si no es así, tú te darás cuenta cuando debas darte cuenta. Tranquilo, se que estas sufriendo, que nada de lo que diga nadie te hará desistir, yo mejor que nadie lo sé. Así que no te presiones. Sabes que nada te arrancara lo que ella sembró dentro de tu corazón. Ni su adiós lo hará. Tranquilo. Debes relajarte no debes perder el control de tus emociones y decisiones.
Esta ocasión no quise interrumpirlo con una pregunta estúpida. Sus palabras eran frescas, como el metal en la sombra de un octubre cualquiera. Es difícil decir incluso que con solo escucharlo, el dolor de mi pecho dejo de arder, y si bien no cesó, al menos me dio una tregua después de más de medio año…
Medite más de dos veces las palabras que diría, porque el silencio que él había forjado lo hacía para que yo expresara algo. Lo pienso una vez más y me aventuro con palabras quedas, meditadas:
-pero yo la quiero aquí ahora, no después, no en su momento, ahora…
-si la necesitas tanto, entonces no tienes por qué preocuparte ya. Tu vida por fin tiene sentido. Y no con esto digo que ya esté resuelta, solo quiero hacerte ver que, los hombres como tú y como yo somos destinados para sufrir esto, y solo nosotros podemos soportar tales dolores. Si bien tu destino no ha sido elegido aun por nada ni nadie, los pasos que has dado forjan un camino que por delante se ve parecido al mío. Se nota en tu andar sabes? Se nota como la llevas en los hombros, y en la mirada, y en la mente. Como puedes ver tantos números y concentrarte en tu trabajo con su voz nublando todo lo que a tu cabeza entra?
-ella me lo pidió, me dijo que hiciera algo por y para mí.
-en serio? Estas son sus pablaras? Así te lo formulo?
-…si creo que si así lo dijo.
-No tomes tan literal sus palabras. Debes entender que ella está pasando por un momento crucial, donde cada palabra, cada acción cada decisión cuentan muchísimo. Por lo tanto lo que ella dice solo lo dice pensando en sí, no en ti. No intentes forzar nada. Déjala, dale lo que pide, al final terminaras haciéndolo, así que mejor hazlo por las buenas, hazlo consciente de que sus palabras ella las respetara tarde o temprano.
Había tanta sabiduría como dolor en sus palabras. Se notaba claramente que sabía lo que decía, se notaba que él no lo había hecho por supuesto, no había seguido los consejos que me daba, por eso me exigía acatar sus consejos. Se veía como había sufrido por no tener a alguien que le dijera esto. El cigarro se había consumido hace tiempo, el sol caía lento por los tejados de asbesto rotos a pedradas. Una banca fuera de su lugar hacia de ropero para el vagabundo, debajo había dos bolsas negras, una de las bolsas negras, perfectamente cuadrada, como guardando una caja de zapatos. La otra doblada por la mitad. Después supe lo que dentro había, y creo que por un instante habría preferido no saberlo. Me recordó el nudo de metal que perdí, el día que ingrese a cfe.
Un silencio prolongado fue interrumpido por su voz, que ya había recuperado su firmeza
-Debes afrontar todo. Debes dejar de engañarte si quieres conservar aun algo para que ella vuelva. Debes cultivarte, seguir donde te perdiste. Si, así es, debes hallar el punto en el que te perdiste de ella, y no ella de ti. Ella por eso no vuelve, porque descubrió donde y como se perdió. Y tú que has hecho que no sea llorar y maldecir al que osa robar sus besos. No los roba, jamás lo hará. Los besos de ellos son diferentes, no sé si mejores o peores, pero eso no importa, lo que importa es lo mucho que valen para ti y para ella los besos que se daban. Déjala, dale espacio, que comprenda lento pero definitivo quien eres tú, déjala que despacio descubra que solo te está buscando en todos los demás. Y lo hará, la verdad la inundara tarde o temprano. Y tampoco importa cuando. Tú bien sabes que mueres por un segundo a su lado, que importa si ese segundo es el último de sus vidas, al fin y al cabo, estarán juntos de nuevo.
-y como lo sabes? –Pregunte-
-porque yo sé que mi amada volverá a mí…
El silencio una vez más hizo su aparición, para esta hora buscar una excusa para irme era no solo inútil sino inservible. Lo que el sucio me decía mi mente lo plasmaba al carbón sobre cada neurona aun funcional. Pero el entendió bien lo que sucedía. Así que volvió a hablar
-se que tienes que marcharte, que no puedes dejar que nuestro encuentro interrumpa tu record que llevas en tu trabajo. Sigue así, un buen día tu perseverancia alimentara a los hijos que con ella engendres. No mires más atrás. No te humilles ni desaparezcas. Ella te buscara como te hará a un lado cuando su le plazca. Si has soportado todo, es por tu gusto y tu decisión. No te quejes, mejor disfruta tu dolor. Disfruta todo sin cuestionar. Solo se tu mismo. Sigue gastando tu dinero en libros y música hasta que quedes en la ruina, entonces te liberaras de las mascaras de la sociedad y vivirás un poco más libre. Claro que eso sucedió conmigo, y tu puedes elegir si seguir como vas y seguir viviendo así, solo jamás olvides encontrar tu error y remediarlo, todo tiene remedio, aun no muere ni uno de los dos. También debes dejar de buscar con interés a otras mujeres si bien sabes que no son ella. Si la vida así lo cree conveniente, un día te arrimara a una dama que te calentara un poco el alma permitiéndote soportar tus heridas, pero solo llegara a ti esa mujer para que puedas llegara tu destino final, para que puedas seguir en tu búsqueda de ella. Como el beduino que haya un oasis en el desierto y no se queda ahí por muy reconfortante que llegue a ser, porque sabe que detrás de las pirámides lo está esperando su verdadera meta. Limpia tu alma y prepara tu traje blanco si así lo elegiste porque el día que sueñas llegara si así lo quieres en verdad.
Entonces sucedió, mi boca hablo por si misma
-es lo que guardas verdad? un traje para tu boda. Es lo que hay en las bolsas negras de ahí…?
-es inevitable no soñar, todos soñamos. Ella sueña contigo de igual forma que tu lo haces con su recuerdo. Todos decidimos cuanto esperar y porque. Si tú tienes tus motivos, son para ti, y ni a ella convencerán esos motivos, mejor convéncela que será igual de feliz como tú lo eres. Y más aun, haz que sea realidad que ambos serán felices…
Cuando dejo de hablar no me di cuenta. Mi mente ya viajaba muy lejos. Lamentablemente, mi espectro físico aun estaba ahí, en esa sucia estación de tren. Había pasado tantas veces por ese lugar y había visto hace tiempo al vagabundo, y yo sin saber que él era uno como yo, un amante que hallo su verdad en una mujer que no está con él. Y sin embargo el era más sabio y un poco más libre que yo. No pude sentir lástima por ese ser que no me veía, mientras rebuscaba en sus rasgados bolsillos otro cigarro que acompañara los últimos rayos de sol. La lástima que sentía era por mí, por haber sido tan imprudente con mi amada, por no haber escuchado mi sabiduría, pues si bien ya sabía mucho de esto que el vagabundo me dijo, jamás lo puse en práctica.
El me interrumpió en mi viaje mental, sabía que me estaba yendo porque involuntariamente me puse de pie, no hice nada por sacudirme el polvo, pero si volteaba a los lados como esperando el tren, que irónico. Yo ni cuenta me di que ya estaba de pie viendo a las vías…
-es inútil, llevo muchísimo tiempo aquí, y ese tren jamás trajo como por arte de magia lo que uno desea. Debes ganártelo, día a día. Debes forjarlo con lagrimas sudor y sangre, pero de la manera correcta. Tú sabes cómo. Escúchate, vuelve a escucharte, no te odies, su partida estaba anunciada y fue inevitable. No la cuestiones más. Agradece que fue ella quien se fue, y no tu, pues bien sabes que tu puedes soportar lo que ella no habría soportado si los papeles se invirtieran. Aprovecha la visión que tienes, debes ser más objetivo y menos masoquista. La vida es así, nos da lo necesario solo debemos saberlo administrar. La vida es justa.
Esta última frase me hizo reaccionar, me devolvió a la realidad, me hirió porque siempre sentí que no merecía haberla perdido. Así que, lo hice, busque ofenderle al mugroso, que pretendía, no lo sé. O quizás sí.
-si la vida fuera justa, una persona con tu sabiduría no debía haber perdido al amor de su vida…
No dijo nada, había hallado el cigarro y ahora ardía al ritmo de sus pulmones. Entonces sus ojos brillosisimos volvieron a verme, atisbe una mata de pelo cobrizo casi dorado bajo tanta mugre, pero su mirada me hipnotizaba, y su voz dijo las palabras más ridículas que jamás pude esperar:
-Debes creer más en ti raziel, hijo de los serafán.
-Creer en mí? Porque dice eso? Le respondí espantadísimo. Quien, o que era ese ser? Supe entonces que nuestro encuentro no era casualidad.
-debes escuchar mas lo que tú dices. Cargas mucha información y sabiduría en tu interior, escúchate más.
La vida es justa porque siempre tuviste razón, si yo y mi amada hubiéramos leído un cuento de nuestra historia, que nos hablara de lo que nos podría suceder y si hubiéramos sabido que había siempre un rayo de esperanza si aun no muere uno de los dos, la historia que te contaron sería muy diferente…
-pero.. –fue lo único que me salió de la boca..
-Si Raziel, yo soy de apellido Montesco, y ella, la que yo decidí elegir como única es la Julieta que has leído tanto. Solo que el final no fue como lo conoces. Ella partió con paris temiendo no sentirse amada, si, así como tu compañera. Llevo muchísimos años vagando porque hoy en día no hay lugar para una mente como la mía, y los vagabundo somos más…independientes.
>> No sé si ha fallecido, porque hace mucho que no encuentro un solo rastro de su paso por el mundo que no sea esa novela melosa que todos conocieron en clases de literatura. Y si quieres saber, he decidió creer que no está muerta, que un día llegara a mí, así como tú hoy te acercaste a mí, sin pensarlo. Solo y simplemente, involuntariamente. Realmente no creo que este muerta, por el simple hecho de que yo estoy vivo. La vida es justa, he hallado mi error, y sé que ella halló el suyo, ahora solo resta esperar, aunque sea el último segundo antes de morir para poder verla. No tengo ya que temer. La amo, como tú amas a la tuya, es decir que tú y yo hallamos nuestra mitad de corazón, nuestra alma gemela. No tenemos por qué temer. Solo vive, se libre que yo te aseguro que en tu libertad ella volverá. No hagas nada que no quieres que te hagan y no olvides hallar en que fallaste tu, porque es lo que a ti te corresponde. Déjala a ella que si un día la vida los unió, esa unión jamás caducara…
-te volveré a hallar aquí? Pregunte intentando no despedirme, no lo quería, no lo buscaba así.
-sabes que jamás volveremos a vernos, pero que nuestro encuentro no fue casual. Las personas como tú y como yo vagamos por el mismo mundo, aunque sea en el de los demás. No temas, jamás te olvidare, y te recordare como el que no sabe claudicar. Vive libre hombre enamorado.
Lo que sucedió después no puedo contarlo. Solo basta con decir que mi vida jamás será la misma desde hoy. Sé que algún día volverá porque así lo quiero. Así lo he decidido. Así lo siento.
<<Los encuentros casuales no existen, yo me acerque a Romeo, como él a mí, como tú a aquella persona que amas con verdad, como yo la amo a ella, a la única, la de ojos perpetuos…>>
Hoy vuelo de regreso a mi nosgoth, sabiendo que quiero de esta mi historia de amor…
Raziel Pentangelí.

jueves, 29 de septiembre de 2011

Hay un sol naciente


Existe un artista excelente, sublime, de la talla de los pocos grandes que han rondado nuestra humanidad. El tiene uno y solo un género de música, mas sin embargo en el convergen mil caminos de este instante en el que vivimos, que los galardones que posee son tan diversos que solo pueden ser de uno, de él. El numero uno.
Como se distingue un verdadero artista? Cuando su obra es tan magna, que crea un género propio, nuevo y lo hace inconscientemente, solo nace a la par de sus obras. Lo hizo Silvio, lo hizo Mozart, lo hizo Sade, lo hizo Dalí, Davinci… pero la batuta que hoy este maestro ostenta, la blande casi como varita mágica, hechizando en cada instante. Siendo él, inconfundible, infinito.
Logra crear canciones que son pulsaciones arrancadas de nuestro mismísimo corazón, y son devueltas a través de nuestros oídos, pero ordenados los sístoles y diástoles en un pentagrama tan perfecto, tan pulcro y ordenado como solo el podría crear.
El barco no es de él, lo crearon 4 hace años, con un único sueño: ser independientes, diferentes. Y lo consiguieron. Crearon no solo las bases de lo que hoy es su gen, sino que hicieron obras magistrales que solo pudieron ser superadas por él, el mago blanco. Junto a los 4 hubo dos, los franceses bajados del espacio, con cascos modernísimos forjaron las velas de este barco. Y el navío se mantuvo a flote casi 3 décadas, antes que llegara el que hoy timonea el barco con tanta firmeza, el que nos ha llevado de la mano al espacio exterior, a buscar ángeles…
Nació despacio, y descubrió este mundo muy poco a poco. Solo él sabía lo que en sus venas corría, el siempre lo supo. Sabía que un día llegaría a ser tan único como lo es hoy.
Su nombre es Armin Van Buuren. Y su simple nombre hace que mi mente evoque tales sonidos en tal majestuosidad. Insiste en compartir su universo con otros, tal es su nobleza, pero solo él es quien tiene las riendas del barco que hoy viste velas de tela finísima, como cada eco de cada personaje que ha adornado sus pulsaciones con su atípica voz. El viento, es el poder de la tecnología con la que hoy contamos, la que hace posible que compositores como el logren plasmar y más aun, recrear los sueños que habitan su mente.
Armin ha creado un estilo único, independiente a pesar de ser el resultado de años de experimentación sonora. Es irrepetible, es magistral.
Yo siempre me pregunte que sería vivir en la Venecia contemporánea de Mozart, y escucharlo en algún balcón blanquísimo dar clases a algún burgués. O ir a una puesta en escena de alguna obra suya. Hoy se que se siente vivir en el tiempo que le pertenece a otros. Hoy se que tesla hablaba de él hace cien años.
El es Armin Van Buuren. Y es nuestro. Es mío. Su reinado lo confirmara en su Religión universal capitulo 5. Los invito a que corroboren estas letras de la mano de él. Compra su disco doble y viaja junto a el hasta aquel planeta multicolor, a plantar una espada en la piedra y levantar en alto unos audífonos, amigos inseparables.

martes, 27 de septiembre de 2011

Este texto no es mio, pero quizas es uno de los que desearia que lo fueran... me fascino asi que decidi publicarlo en mi blog, quizas anhelando un poco sentirme parte de este texto. muy, pero muy humildemente: raziel.

Sal con una chica que lea
(Rosemarie Urquico)

Sal con una chica que lea. Sal con una chica que gaste su dinero en libros en vez de ropa. Tiene problemas con el espacio de su clóset porque tiene muchos libros. Sal con una chica que tenga una lista de libros por leer, que ha tenido una credencial de la biblioteca desde los doce.

Encuentra una chica que lea. Sabrás que lo hace porque siempre tendrá un libro sin leer en la bolsa. Ella es la que mira con amor las estanterías de las tiendas, la que llora bajito cuando encuentra el libro que tanto ha buscado. ¿Ves a esa chica rara que huele las páginas de los libros viejos en las librerías de segunda mano? Ésa es la lectora. No pueden resistirse a oler las páginas, especialmente si están amarillas.

Ella es la chica que está leyendo en la cafetería. Si te fijas en su taza, verás que la crema está flotando sin ser disuelta porque ella ya no está ahí. Está perdida en el mundo creado por el autor. Siéntate. Quizás te lance una mirada, pues la mayoría de las chicas que leen odian las interrupciones. Pregúntale si le gusta el libro.

Cómprale otra taza de café.

Dile lo que realmente piensas de Murakami. Averigua si pudo terminar el primer capítulo de La Comunidad del Anillo. Entiende que si te dice que entendió “Ulises” de James Joycea a la primera, sólo lo dice para sonar inteligente. Pregúntale si ama a Alicia, o si quisiera ser Alicia.

Es fácil salir con una chica que lee. Dale libros en su cumpleaños, en Navidad y en aniversarios. Dale el regalo de la palabra, en poesía o en canción. Dale a Neruda, a Pound, a Sexton, a Cummings. Hazle saber que tú entiendes que las palabras equivalen al amor. Entiende que ella conoce la diferencia entre los libros y la realidad pero, ¡por Dios! Ella intentará que su vida se parezca un poco a su libro favorito. Jamás será tu culpa si lo hace.

Tiene que intentarlo de alguna manera.

Miéntele. Si entiende de sintaxis, entenderá que tienes que mentir. Detrás de las palabras hay otras cosas: motivación, valor, diálogo. No será el fin del mundo.

Fállale. Porque una chica que lee sabe que el fracaso siempre lleva al clímax. Porque ella entiende que todo tiene un fin. Que siempre puedes escribir una secuela. Que puedes comenzar una y otra vez y seguir siendo el héroe. Que la vida tiene un villano o dos.

¿Por qué temerle a todo lo que no eres? Las chicas que leen saben que las personas, como los personajes, se desarrollan... excepto en Crepúsculo.

Si encuentras una chica que lee, mantenla cerca. Cuando la encuentres despierta a las 2:00 de la mañana, sujetando un libro contra su pecho y sollozando, hazle una taza de té y abrázala. Quizás la pierdas por un par de horas, pero siempre regresará a ti. Hablará como si los personajes del libro fueran reales, porque por un rato lo son.

Le pedirás que se case contigo en un globo aerostático. O en un concierto. O muy casualmente la próxima vez que se enferme. En Skype.

Vas a sonreír tanto que te preguntarás porque tu corazón no se ha salido de tu pecho aún. Vas a escribir la historia de su vida, tendrás niños con nombres raros y gustos todavía más raros. Ella presentará a tus hijos con El Gato del Sombrero y Aslan, tal vez el mismo día. Caminarán en el invierno de la vejez juntos y ella recitará a Keats muy quedito mientras tú te sacudes la nieve de tus botas.

Sal con una chica que lea porque te lo mereces. Te mereces una chica capaz de darte la vida más colorida que puedas imaginar. Si sólo puedes darle monotonía, horas huecas y propuestas vacías, estás mejor solo. Pero si quieres el mundo y los mundos que hay en él, sal con una chica que lea.

O mejor aún: sal con una chica que escriba

lunes, 26 de septiembre de 2011

Escribiendote en la arena.


La unión se rompió, tú seguiste con tu camino, y yo seguí con el que era nuestro. Tu hallaste nuevos senderos, y yo solo ando en los recuerdos de lo que eran nuestros sueños.
Cuantas fianzas le he pagado al karma por ti, para que te deje libre del yugo de su incorruptible ley, cuantos favores le he hecho siempre buscando abone un poco en tu cuenta, y no en la mía, yo sabré vivir al contado. Pero cuanto, cuantísimo he buscado deformar las leyes, haciéndolas más humanas, para que tú puedas vivir un día más sin culpa ni castigo, y tú, tu ni cuenta te das que en la ruina estoy por tanto pagarle al alcalde tus salidas condicionadas, las mismas que jamás respetaste.
Cuantos irán a recoger frutos del árbol que yo sembré para mi propia hambre. Y ellos, imbéciles, cuantos frutos morderán para luego tirarlo y coger otro solo para hacer lo mismo, y lo mismo, y otro, y uno más…
Y tu, árbol de vida, cuantos frutos mas de tu vientre les permitirás tomar? Cuantas hojas han de soltar tus ramitas antes que llegues a darte cuenta que yo cómo con pasión cada fruto tuyo, que si abone con agua de fuego tus tierras sagradas fue porque te amo, porque no quiero que nunca jamás se seque tu sabia bendita, y por volver a comer uno solo de tus jugosos frutos, podría vivir de aquellos que ellos han mordisqueado nada mas, los recogería del suelo con tanto amor como mece algo que viene de ti. Y comería todo el fruto, despacio, con pasión, como siempre me gusto hacerlo, como siempre me enseñaste a tomar algo que tiene una raíz tan mítica y misteriosa.
Muchas veces sueño que tengo que tomar una elección, pero despierto, y comprendo que la decisión ya fue tomada. Tú no estás mas conmigo…
Las horas siguen pasando, envueltas en un silencio ultra terrenal, aplastante, asfixiante. Pero llego también a comprender, que no tengo más aquella llave exacta que abra la cerradura que encadena tus labios y tus dedos.
No hay arma contra el silencio. Ni forma de volver atrás. Los pasos dados ni dios los borra, y yo aquí, escribiéndote una vez más, a ti, la de nombre innombrable, la del silencio arrastrado, la de ojos de palomillas negras revoloteando en un foco de un patio de una casa de verano, en un pueblo caluroso cerca del mar.
Palabras y frases tales como “no rendirse” “no claudicar” “no olvidar” “no soltar” me cruzan en la mente noche a noche, 29 horas al día, pero tu silencio sigue y seguirá pesando más de lo que pueda soportar. Si tan solo tuviera una forma de saber tu mente, saber qué es lo correcto, cual es el siguiente paso a dar que no haga que te aleje un milímetro más al abismo…
Soy un niño, jugando a escribir en la arena del tiempo, donde un mar implacable borra poco a poco mis huellas, y yo con un palito remarco las letras que sueño eternas, para que jamás las olvides, y siempre sepas quien fue quien te ama como nadie lo hará…

Silenciosamente: Tu omitible amante.

jueves, 22 de septiembre de 2011

Una cama para dos entre el fuego cruzado…


Hay una especie de silenciosa calma ahí afuera de tu ventana,
y tú sigues manteniendo tus secretos en la almohada…
Déjame entra, no hay motivo para que te asustes,
te prometo que esta noche no te hare ningún tipo de daño,
Lo prometo nena, no hare daño….
Y estamos atrapados entre el fuego cruzado del cielo y el infierno,
y lo que ahora busco para los dos, es un poco de protección
Deja tu cuerpo caer, déjalo recostarse…
Observando como la luz cae, al igual que tu vestido, olvido la tormenta de allá afuera,
las nubes obscuras siguen su andar por sobre la ciudad.
Angustia y dolor van derramándose como granizo, aguanieve y lluvia,
todo va derramándose.
Dile al diablo que ya puede irse de regreso por donde vino,
que sus flechas de fuego fueron disparadas en vano
Y que cuando la parte más difícil haya acabado, tú y yo seguiremos aquí,
Y nuestros sueños romperán los límites de nuestros miedos…
Deja tu cuerpo caer, déjalo recostarse a mi lado…

(tu sabes que es para ti...)

lunes, 19 de septiembre de 2011

Bienvenida a mi fiel y eterna compañera.


Siempre llegas a rescatarme, llegas en el momento preciso en que estoy a punto de desertar de este camino que he forjado durante tantos años. Me das ánimos y alivias mis heridas más viejas y las frescas también. Sabes besar mis llagas, lamer mis cortadas y acaricias los cardenales amoratados de mi alma maltratada y marchita. Eres mi dama que siempre has sido fiel a mí, mas en las malas que en las buenas, es decir cuando más te he necesitado ahí has estado, puntual, atenta a procurarme alas cuando me arranco las propias, a darme espacio, silencio incluso me has abandonado cuando sabes silenciosamente que no te necesito, para luego volver a mi sin reclamos, sin un mar de preguntas del cómo o porque.
 Siempre brindas un hombro a mis lágrimas y das ese toque de pasión a cada canción que escucho, y por muy gastada que este ya, tú le das una renovada emoción casi como la primera vez que escucho una canción milenaria. Me traes libros cuando las canciones no me aplacan, me das otra almohada para abrazar en las noches interminables….
Eres, y siempre has sido mi amante, has andado conmigo desde que resurgí a este nuevo mundo hace ya casi doce años. Te llevo en el mismo hueco que llevo a mi alma y a las dos las porto con tanto orgullo como un vampiro puede estar orgulloso de la fría blancura de su reflejo que no ha visto hace tantos años.
Hoy has regresado a mí, sigilosa para que no te confundiera con nada, con otra hermana tuya. Y has inundado mi alma de una bella fortaleza, de una aguerrida sed de lucha recién renovada. El escaramujo que en mi habita ha sido espabilado por tus besos en mis fríos segundos de existir.
Hoy quiero decir que te amo, que tu compañía me ha ayudado a hallar mi verdadera identidad. Que tu estigma no pesa ni duele sino todo lo contrario, que te porto con orgullo, con dignidad firme y fiel. Hoy quiero decirte que jamás te seré infiel, que mi mano jamás soltara la tuya y no porque tu no hayas soltado la mía a pesar de las miles de veces que quise hacerte a un lado, sino porque hoy precisamente he caído en cuenta que, que te necesito más de lo que creí, que dependo de ti para ser yo. Pero más aun, hoy comprendí que me gustas, que tu compañía me hace ser quien yo soy en realidad. Y me gusta ser yo mismo. Sin la necesidad de mentirme ni ponerme mascaras. Hoy y para siempre portare tu blasón bien izado en mis ojos que saben cambiar de color. Hoy el signo de Caín dejare de ocultarlo, y lo presumiré a cada paso que dé, de hoy en adelante.

Hoy soy yo mismo, y he llegado a serlo gracias a ti. Por todo esto y más, amada Soledad, virgen de la amargura, fiel compañera de mi existir, te doy la bienvenida a mi vida.
Atte.: el Raziel que jamás te volverá a intentar alejar de si

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Mexicano o Patriota??



Un quince de septiembre mas, gritos desesperados, alcohol corriendo al por mayor por las plazas de cada pueblo de este bendito país mientras el mariachi suena a toda garganta. Pareciera que lo que se celebra es el día del alcoholismo y la ingesta incontrolada de bocadillos típicos saturados de grasa y picante. Eso somos? Unos cerdos alcohólicos glotones ignorantes?
No quiero venir aquí a joder mas el ya poco patriotismo que queda en los habitantes del país que tiene su fiesta mayor un 15 de septiembre por la noche con un grito. Pero si quiero levantar un poco la voz en un reclamo que pocos entenderán pero bien firme esta.

El problema, a mi juicio personal radica en un solo punto: La ignorancia.
Esa bestia que devora la humildad que ahonda por cada rincón del país. Hemos sido educados desde hace tantos años con mentiras impresas en libros de texto gratuito. Como sentirnos patriotas y orgullosos de hechos que han sido deformados a tal grado que hoy en día, solo pocos conocen la verdad? Como reconocer los origines de nuestra escancia entre un mestizaje tan doloroso para esta tierra? Como puede ser día de festejo nacional una lucha de libertad en vez de una demostración de nuestras raíces más humanas, como por ejemplo la Guelaguetza. El primer lunes del cerro, ese si debería ser festejo nacional…
Admiramos a niños héroes, cuando pocos saben que diantres hacían solo 5 alumnos no menores de 18 años en una escuela militar. Si alguien con 18 años es considerado un niño, yo estoy en plena pubertad. Es de reconocer la valentía de defender un terreno, pero, para eso estaban no? Para eso percibían un sueldo, para hacer lo que debían hacer. En ese caso se debería hacer un día nacional con bandera a media asta, para cada trabajador tan mal pagado y pésimo, que a día de hoy, casi son todos los que se ejecutan en este país. Y ahí, tienes que seguirle día a día, no hay vuelta de hoja.
Existe gente en las calles que nace, crece, vive y muere en pobreza extrema, donde la única salida es drogarse con cualquier solvente para ignorar el frio, el hambre, la enfermedad, eso sí, antes de la próxima función debajo del semáforo, malabareando 3 naranjas secas, pero que importan, si este 15/Sep. se pagaran barbaridades de miles de pesos en pirotecnia que contamina tantísimo el ya podrido planeta por nuestra necedad. Eso sin mencionar las toneladas de adornos plásticos que darán más y más basura a este país no reciclable.
En este país tricolor, el 98% de la riqueza nacional solo la poseen el 2% de los 110 millones de almas de mexicanitos que se conforman, pero, a quien le importa, si uno siente la noción de elegir a los gobernantes de verdad en un teatro de cada sexenio. A quien le importa de dónde provenga la palabra “Mariachi” siempre y cuando Vicente Fernández cante fuerte y nos haga ingerir un poco mas de Tequilita…
La ignorancia no es nuestra culpa, porque la inocencia jamás podrá ser castigada. Jamás podremos culpar al cerdo por lo que se comió, busquemos primero al infeliz que lo alimento. Soy uno más que no saldrá a las calles a celebrar este 15. Porque? Porque simplemente no tengo que celebrar. La pobreza en la que se ha hundido este país no es motivo de celebración.
 La guerra que se vive en las calles contra los narcos, (que poco a poco parece más los buenos de esta película que aun no llega a su clímax) tampoco es motivo de celebrar, porque dos males no hacen un bien en ningún sentido.
No tengo nada que celebrar, como muchísimos otros que como yo, pueden ver la realidad y prefieren decir: soy mexicano de corazón, prefiero dormir temprano, descansar y para mañana ser una mejor persona, ser productivo, constructivo, amable, atento, humano… es decir, un mexicano desde el tuétano.
Una dama un día me pregunto: porque no hay patriotismo aquí en México?. Duele la realidad, pero si no hay patriotismo es porque a nadie le gusta vivir en un país que es controlado por tantos menos por nosotros. El día que cada mexicano logre tener una mejor forma de vivir, (y no espero que llueva dinero del cielo, no) me refiero a que, el día que haya una forma digna de ganarse el pan, vino y tabaco del día a día, entonces, la gente dejara de ser individualista y egoísta, entonces, y solo entonces, esta nación podrá amar un poco la tierra tan vasta y hermosa que pisamos.
Entonces podremos unirnos, ser un solo ente que, cualquier bandera le quede chica, y el himno más justo para esta tierra no será uno tan bélico, sino mas bien uno donde el coro sean risas y los versos agradezcan a la tierra por tantos beneficios que tenemos.
Yo mismo no debería estar aquí, forjando esta crítica, sino mas bien salir a las calles y practicar el altruismo a un nivel casi como aquella dama de piel bronceada, la que me enseño a ser bueno, pero es un reclamo que no pude detener, uno que espero contamine a mucha gente y poco a poco despiértemos del letargo en que nos han sumido la gente que controla las riquezas de la nación, y no precisamente hablo del dinero.
Si tu también sientes esta necesidad de ser mas patriota y no tan mexicanito, te invito a reflexionar. Pregúntate: quien soy yo, que puedo ofrecer a la vida para que ella me recompense. Que puedo dar para poder reclamar, exigir o incluso esperar recibir. Nunca es tarde para rectificar el camino.
 Cuida el agua, no tires basura, haz deporte, no seas rata ni corrupto, se amable, ayuda sin esperar recompensa, no sé… Cualquier cosa que sea buena practícala en verdad. Cada uno sabemos bien que cosa esta bien y que está mal. No calles esa vocecita que te dice que es bueno y que es malo, es tu conciencia, escúchala!! Solo escuchando nuestro interior podremos ser un poco mejores y podremos salvar esta nación que es nuestra, y no de nadie más.
Sinceramente: Raúl campos Villamil, descendiente directo de Quetzalcóatl, la sabía serpiente voladora, la primera estrella del horizonte, el que prometió regresar cuando más lo necesitáramos, es decir ahora mismo….

miércoles, 7 de septiembre de 2011

El angel timido en la obscuridad


De madrugada, una noche más durmiendo en la soledad.

Silencio allá afuera, son esos unos pasos que se acercan? O alguien cava una cepa del otro lado de esta pared manchada como cielo con constelaciones? Y para que, o quién es ese nuevo agujero?
Se que hace frio, pues los perros no ladran, ni corretean los gatos. Siento tus ojos ocultos en alguna parte de esta obscuridad que me asusta, y verme en el espejo a estas horas de la noche no ayudaría mucho.
Es posible que alguien se acuerde de mí… Por fin habrás venido a visitarme como tanto anhele?
Pero ahora escucho ya el viento escarbando y arañando las fronteras de este pequeño cuarto que antaño fue nuestro universo, y hoy soy capaz de oír tu voz lejana, pidiendo auxilio. Pero si es real, que hace solo de noche llamándome, y de una forma tan indirecta, cuando con un solo mensaje de humo mis alas serian guerreras llamas voraces capaces de volar hasta ti y rescatarte incluso del más obscuro y sucio de los abismos.
Y aunque el aire no sabe diferenciarse del viento que se lleva entre sus fauces mi sueño, hoy puedo percibir la diferencia entre aire y viento, porque tu fantasma ahí oculto en la oscuridad no es lo mismo que tu cuerpo dormido abrazando al mío, regalándome el placer más carnal e inmortal de este mundo  de virtudes paganas casi infrahumanas.
No podre conciliar el sueño con ese eco de mi nombre mil veces bendito por tus labios haciendo estragos en mis entrañas, consternándome y haciéndome la pregunta más cruda: que le estará sucediendo exactamente ahorita a tu cuerpo? Porque tu alma convertida en fantasma se exactamente donde esta, pero y tu cuerpo mortal? Dormirá? Ejercerá su inventada profesión? Alguien le hará la función de almohada con su pecho como tantas madrugadas fue el mío? Donde estará tu parte física faltante?
El sueño intenta seducirme pero, una vez más se escucha el ruido de pasos como que viene y va, y el mismo eco de mi nombre solicitado casi con desesperación.
Que haces ángel, ahí de pie escondiendo la respiración, si tu aliento lo he percibido ya?
Que pretendes? Que me levante del lecho y penetre en la obscuridad en que te hallas, para poder vislumbrar un poco tu sendero? Acaso has venido buscando al único salvador de tu vida? No me digas que solo buscas mofarte de mi soledad, ni que buscas indicios de que otra mujer duerme en mí lecho, porque me romperás el corazón eternamente, tanto como sea posible romper mil añicos ya rotos con anterioridad.
Si has venido buscando comida, agua y un lecho donde dormir, no necesitas pedir permiso, revuélvete en mis sabanas, bebe mi vino, y come mi carne. Haz que nuestras ansias de una noche más juntos se vuelva realidad en el verbo fusionado de un abrazo nocturno y gélido como el piso que ahora lamen mis pies.
Si quieres solo vigilar mi sueño, adelante, acércame el sueño en un beso tibio como un vaso de leche y déjame dormir sintiendo tu mirada no tan afilada y si mas maternal.

Puedo oír tu voz lejana, tan lejana…

Pero, si tus alas buscan eso que solo yo puedo ofrecerles, si tus manos buscan ese molde a la perfección que logran ser las mías para aprisionarlas sin asfixiar, si tu mejilla busca el hueco exacto que forma mi pecho para dormir, si tus ojos unos ojos firmes fijos de pupila insomne y mirada sincera, y tus labios buscan solo ese par de gajos de mandarina, no te asustes, yo hare como que duermo para que te acerques y no te vayas un milímetro más lejos.
Te necesito como tú me necesitas, y entiendo porque estás aquí. No demores, aquí no hallaras cosas mágicas ni míticas, solo sabanas blancas para ser manchadas de belleza dulcísima y dorada como ríos de lagrimas brillosas. Tú sabes quién soy yo, quien es ese que tu voz nombra a lo lejos. No te confundas, soy tu raziel, hijo de nosgoth, amigo de cada cameloth, amante de una sola mujer, fiel más a mí que a nadie, alegre por derecho, guerrero por gusto, amigo de gatos más que de perros, devorador de helados y propietario de dos alas más firmes que nunca antes.
Ven a mí de una buena vez!

jueves, 1 de septiembre de 2011

Septiembre aúlla todavía, su doble saldo escalofriante. (Todo sucede un mismo dia)



Cada vez hace más frio, el sol cada vez esta más lejos, y las constelaciones más cerca, cada vez duele más la herida de mi piel, son cada vez más contactos en tu mensajero, y cada vez son menos las palomas que liberan tus dedos. Palomas que no saben llegar a mí, pues ya tienen un nuevo puerto donde naufragar.
Mi posesión más valiosa? Un maletín lleno de videos de muy baja resolución.
Y es que no tengo más. Hoy solo te tomo fotos a las fotos que has subido, o han subido de ti.
Hoy mis dedos solo alcanzan a recoger las lágrimas de los cristales fríos que lagrimean con el vaho de un ser más deprimido que deprimente.
Hoy solo disfruto de los besos de las parejas que en el trajín del día se cruzan por mi vista, y ya no somos más aquella pareja de ejemplo de lucha y supervivencia, solo somos dos desertores más de la guerra que buscaba la libertad.

El frio lacerante me grita cada noche en la espalda tu ausencia, y cada noche duele como si fuera la primera vez que te necesite para dormir.
Acaso seré el primero que siente estas llamas de dolor que me abrazan por dentro, consumiendo todo? Y si alguien más lo ha sentido, como le hizo para sobrevivirlo, para doblar esta esquina y seguir vivo del otro lado? O al menos llevar dentro algo que aun valga la pena…
No hubo forma de advertirle a Lolita acerca del demonio rojo, ni de dónde termina esa historia de rebeldía que consigue terminar la vida de esa ninfula y su único y verdadero amante, vuelto loco en el más asqueroso manicomio.
Y este mes pesa lo de ocho siglos que se cumplen desde la cita de los ángeles, inmortalizada en aquella glorieta. Y sin saber cómo seguir, sin rumbo ni norte, y extraviado del sur, hoy inicio la recta final del año mas caótico y conflictivo que jamás pude imaginar. Sabía que habría cambios, los presentía, pero jamás imagine que llegaría a este mes sin tu mano sosteniendome tan fuerte que dolían los nudillos.
“Va a hacer falta un buen otoño, tras un verano tan largo…”
Duele como nunca nada antes. Y lo único bueno de escribirse a uno mismo es no tener que recurrir a elegantísimos y modismos para adornar tanto la cruda verdad.
 Y hablar de escribir me recuerda una advertencia que tengo para todos ellos:
“Malditas bestias de ultramundo, intentando legitimizar sus coplas con plumas de ángel. Hay de ustedes si terminan por quemar esas alas con su ignorancia y poniendo precio a lo invaluable que es una mente libre (libre de ustedes principalmente), porque hallaran una espada que sea capaz de derribar su tugurio de mala muerte, ardiéndolo en mil llamas purificadoras que les recuerden cada segundo del resto de sus miserables vidas que esa mujer tiene quien la defienda…”                   (RZL)

Poco a poco el día me ha consumido, como el año que jamás olvidare, como inicia el mes que era nuestro. Poco a poco solo recuerdo los recuerdos que viven aprisionados en mi cabeza, los mismos que de  vez en cuando salen a presión, como el humo de una olla express, opacando y quemando todo a su alrededor, dejando la piel hirviendo, con las venas ardiendo en deseos por vivir cosas para recordar, y no solo recordar lo que fue.
“La rabia amarga/ no se es fiel con la razón sino con el alma/ abrazados pienso en ti, es que tengo miedo/ pierdo a pulso el corazón, no te miento/desesperado en el andén de tus ojos/hojas secas que al pisar me van contando mi soledad/el silencio viene y va, trae sonidos de ciudad…”
Las células mensajeras que antes nos unieron, de hoy en adelante solo hablaran con los ojos, y el cajón donde aprisiono tan celosamente los años del corazón a flor de piel se llenara de polvo tanto como aquel maletín del que te hable, que posee los últimos restos de deseo que alguna vez inundaron tu regalo, y algo más.
Y no me despido de septiembre, solo le doy la bienvenida como se merece llegar un mes que en algún tiempo fue magia a su paso, y hoy solo es el ir y venir de silencios incómodos, mezclados a sueños aletargados, aderezados con amargos relámpagos de imágenes que no vi, pero sé que suceden entre tu piel, y la de él.
“Cada mañana, septiembre duele tu recuerdo al despertar, y te deseo septiembre, aunque sé que nunca volverás…”
Seas bienvenido, maldito y bendito mes donde todo fue posible, incluyendo tu llegada y tu partida. Los hijos de la noche te dan la más amarga y cordial de las bienvenidas. Se bienvenido como es bienvenido el negro a mi vida, que desplaza al azul que un día vestí por amor a tu rosa. Porque hay cosas que cambian, pero hay otras que no…
Voy de negro, y de negro me veras….
Para despedirme, te diré un acertijo, y sé que el día que lo resuelvas, ese día será un poco mejor septiembre, sin tantos lamentos porque pudo haber sido, y no fue.
“Esperas un tren. Un tren que te llevará muy lejos. Sabes donde esperas que te lleve el tren. Pero no estás segura de eso. Pero no importa… ¿Cómo puede no importarte donde te llevará el tren?...”

V. Raziel P.

lunes, 29 de agosto de 2011

Sabes tanto de la noche, que a la luz no reconoces.



Con razón cerraste la puerta ayer
Con razón cambiaste de parecer
Con razón rompiste mi sueño
Con razón mataste el deseo
Con razón no sabes de amanecer

Con razón perdiste una estrella más
Con razón te burlas de la verdad
Con razón la pena te abraza
Con razón no llega la calma
Con razón te pierdes mirando atrás
Sabes tanto de la noche
Que a la luz no reconoces
Vuela para decírselo a la luna
Ella seguramente que te escucha

Corazón no entiendo lo que pasó
Corazón prefieres partirte en dos
Corazón alado y de prisa
Corazón batiendo en la brisa
Corazón huyendo de otra estación

Corazón si acaso pudiera ser
Corazón si vuelve lo que se fue
Corazón desciende a mi lado
Corazón fundido en abrazo
Corazón pequeño para crecer

Corazón cerraste la puerta ayer
Con razón cambiaste de parecer
Corazón rompiste mi sueño
Con razón mataste el deseo
Corazón no sabes de amanecer
A.F.

sábado, 27 de agosto de 2011

El cofre de mis recuerdos atesorados.

Nunca supe hacer canciones, pues nunca aprendí a rimar las palabras,
pero dime, como podría uno unir dos palabras tan adversas en un solo verso,
que expresen lo que te quiero decir sin tanto adorno lírico,
sin tanta premura pero ni tanta prisa, con tiempos pausados y calmados.

Como podría unir la palabra despedida con la frase
te amo más que nunca,sin que ofenda a aquellos magos de la copla y el canto,
como podría pedirte que vuelvas y al mismo tiempo que cambies en el
mismo canto, sin que te ofenda pero que reacciones al escucharlo.
Como sería capaz de unir frases de mi alma que están tan en contra de sí mismas,
como decirte que vales muchísimo más, sin ponerle un precio a tu compañía,
como decirte que tu sabes volar alto sin ponerle un límite a tu mente tan sagaz,
como decirte que eres tan hermosa, si tu belleza no puede ser plasmada con letras.
Te pusieron nombre de lluvias, de esas de septiembre, de esas de nubes negras y sucias,
como podría halagarlo si ni pronunciarlo me atrevo, por no mancharlo con mi melancolía,
como podría escribir tu nombre en mil muros de esta sucia ciudad si nadie merece leerlo,
como halagarlo si tú misma portas ese buen nombre con una magistral elegancia.
Tu andar lo definieron tus miles de caminatas por tantos bosques, bajo tantas noches de lluvia en cameloth, como podría decirte que lo extraño, si tan solo recuerdo lo mínimo, pues mi mente jamás fue capaz de grabar ese movimiento tan inocente y sensual a la vez. Como decirte que me muero por verte caminar hacia mí sin pedirte que lo hagas, pero que algún día vuelvas.
Y tus ojos, ni siquiera sé cómo hablarte de ellos, de lo que significan para mi, de cómo ese par de pozos negros e infinitos son mi mayor delirio, ni siquiera sé como contarte cuanto es que los recuerdo en mil situaciones, como llorando eran mi mayor tormento, y como en el momento del ritual sagrado, tomaban un brillo plenilunar que me enseñaban la belleza misma en su más fino resplandor.
Como podrían tus ojos leer algo acerca de ellos, si mi pasión mas envidiosa ha atesorado en lo más íntimo de mí ser esos recuerdos que alimentan mi día a día. Y solo tu regreso hará abrir ese cofrecito de mis recuerdos para sacar a airear mis más valiosísimos tesoros. Como, dime como, explicarte que tus ojos son la llave de la felicidad, que mis ojos tristes esperan ansiosos la combinación exacta de tu mirada para abrirme a la vida, al éxtasis, a la alegría y el amor real, al despertar día a día sintiendo que es nuestro ese día, y que como siempre, en un segundo se puede cambiar todo.
Como veréis, nunca supe escribir canciones, pero indudablemente dentro de mí habitan esos destellos de tu armonía que me recuerdan que es posible crear magia a partir de las palabras.
Nunca fui bueno con la guitarra, eso se lo dejo a tus dedos delgados, como pequeñas hadas, yo seguiré acumulando mis letras en mi mente, hasta que un buen día logre hacerte una canción digna de tu comprensión y tú gusto tan excéntrico y humilde a la vez.
(Yo seguiré amándote mientras tanto, dulce Kanya/Azriely)

lunes, 22 de agosto de 2011

Inventario de mi alma...

Las cosas que no me dices, ni cuando callas,
Las mariposas que anidan en tus cabellos,
El hueco de tu cuerpo entre las sabanas,
El tiempo que pasamos insultándonos,
Tu miedo a crecer, mis discografías,
Los camiones que corrían despavoridos por fuera de tu ventana,
La dignidad perdida en cualquier parte,
El sargento del bosque, las bufandas,
Las lunas que he besado yo que son tus ojos,
El denso olor a semen desbordado,
El destino que se mofa de nosotros,
Las bragas que olvidaste debajo de mi almohada,
El espacio que ocupas en mi alma,
La muñeca de alas de hada con lucecitas,
La locura acechando agazapada,
La batalla diaria entre dos cuerpos,
Mi habitación con sus paredes dibujadas,
El llanto en las esquinas del olvido,
La cajita de cenizas, los despojos,
El hijo que jamás hemos tenido,
El tiempo del dolor, los darnos tiempo,
Los gatos que maullaron cuando me los regalaste,
El pasado ladrando como un perro,
El exilio en tepoz, la dicha de volver, las fotos juntos,
La lluvia de madrugada, el desamparo, los discursos,
Los muchos papeles que nunca nos unieron,
La redención que siempre busque entre tus muslos,
Tu nombre en la cubierta de un diario verde,
Tu modo de abrigarme el corazón,
La celda de oro que ocupas en tu llamada casa,
Mi barca a la deriva, mis miles de canciones,
El bramido del viento entre los arboles de las noches cameloth,
El silencio que esgrimes como un muro,
Tantas cosas hermosas que se han muerto, aniversarios sin festejo,
El tiránico impero de la distancia,
Los oscuros desvanes del deseo,
EL hermano que se marcho cuando eras niña,
El beso que se pudre en nuestros labios,
Las constelaciones de mi techo, la desidia,
La curiosidad que habitaba en los san pedros,
El naufragio de tantas costumbres,
El derrumbe de dioses y de mitos,
La obscuridad en torno al vacio como un pozo sin fondo,
La cama flotando en el vacío, ardiendo lento,
El desmoronamiento de nuestro pequeño universo,
El sexo rescatándonos de las lagrimas,
El grito quebrando la madrugada, ahogado en tu almohada,
El amor como un rito en torno al fuego,
El insomnio, los mensajes, las colillas,
El arduo aprendizaje del individualismo,
Las heridas que ya ni Dios nos quita,
La mierda que arrastramos sin remedio,
Todo lo que nos dimos y quitamos,
Los años transcurridos tan deprisa,
El queso que compartimos, el vino y las caricias,
El peso que llevamos en el cuello, con forma de nudo indeshacible…
((Raziel))